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La costa de Rada Tilly ofrece postales únicas y experiencias que sorprenden incluso a quienes viven desde siempre en la villa. Una de ellas es Los Pozones, un sector que aparece únicamente cuando baja la marea y que, en los últimos años, se transformó en un plan imperdible para quienes buscan un contacto distinto con el mar y la naturaleza.
Pablo Alvear, referente de Turismo de la localidad, explicó de qué se trata este particular fenómeno que cada vez atrae a más familias y visitantes. “En la playa tenemos la zona de los Pozones, que es cuando baja la marea, se genera este espacio intermareal, que es ese estrecho que se descubre cuando baja el mar. Cercano a la Falsa Punta, con estos pozones que se generan, y es un lugar increíble para poder disfrutar en familia, con amigos”, destacó.
Según Alvear, no se trata de un sitio nuevo, pero sí de un atractivo que se popularizó en el último tiempo. “Creo que en los últimos años se ha popularizado, y es un lindo lugar para conocer. Mucha gente por ahí no lo tiene tan explorado, pero los que van vuelven permanentemente. Es un gran lugar en Rada Tilly”, sostuvo.
Según Alvear, no se trata de un sitio nuevo, pero sí de un atractivo que se popularizó en el último tiempo. “Creo que en los últimos años se ha popularizado, y es un lindo lugar para conocer. Mucha gente por ahí no lo tiene tan explorado, pero los que van vuelven permanentemente. Es un gran lugar en Rada Tilly”, sostuvo.
Un espacio natural habilitado para disfrutar
Consultado sobre si es un sitio recomendado para visitar, Alvear no duda: “Es un lugar que ofrece la ciudad para disfrutar, Que muchas familias visitan, ideal para ir a conocer y pasarla bien. Obviamente con todas las recomendaciones sugeridas”, aclaró.
El referente de Turismo remarcó que, si bien el entorno es muy amigable, hay cuestiones básicas de seguridad que deben cumplirse. “Es una zona que queda en el intermareal, en un sector rocoso, pero que con cuidado y seguridad y siguiendo las recomendaciones del personal de los guardavidas que trabajan y están para justamente prevenir, no hay mayores inconvenientes”, explicó.
Y agregó que quienes descubren este rincón quedan encantados: “El que llega y puede disfrutar eso… vuelve. Es un lugar muy deseado para aquel que ya lo conoció, es volver a ese lugar”.
La clave: conocer el comportamiento de la marea
Uno de los puntos más importantes para planificar la visita es saber en qué momento del día se producirá la bajamar. “Las recomendaciones por ahí en ese lugar es tener en cuenta el tema de la marea, cuándo sube y baja. Se le puede consultar a un guardavidas cómo están las condiciones para ver si se puede ingresar o no ingresar”, indicó Alvear.
Quienes viven de toda la vida en la localidad ya están familiarizados con el comportamiento del mar, pero para los turistas la consulta es clave. “Para aquellos que son visitantes, que todavía no conocen, siempre está bueno preguntarle a un profesional en la materia, que sería un guardavidas. Ellos están aggiornados a eso antes de poder tomar una decisión de entrar o no entrar”, puntualizó.
Además, recordó un punto que muchos pasan por alto: cuando la marea vuelve a subir, el área queda completamente cubierta por el mar. “Es la única recomendación fundamental. Cuando sube la marea hay que salir de los lugares porque es algo que queda cubierto”, remarcó.
Los pozones: piletas naturales únicas
Lo que convierte a este sector en un sitio tan especial es que, cuando el mar se retira, deja al descubierto unos 600 metros de costa. En ese desplazamiento se forman los pozones, “como grandes piletas para poder disfrutar en familia”, describió Alvear.
Fuente ADNSur